Lala
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Éste es uno de mis clásicos en Ponferrada, al que he ido en numerosas ocasiones. Su situación es inmejorable, enfrente del castillo, y en verano montan una terraza a los pies de éste, muy agradable especialmente para cenar bajo el castillo iluminado. Este restaurante es bastante famoso en la localidad, y es de los mismos dueños del hostal La Encina, que se encuentra en la calle posterior.
El interior del restaurante es muy curioso. Tiene dos alturas, planta de calle y sótano, y está decorado de forma muy rústica, con abundancia de madera y piedra. La planta superior tiene un gran hueco central, desde donde se puede ver toda la planta baja, estando las mesas dispuestas alrededor del mismo, en una especie de corredor. En la planta inferior se encuentra el bar donde se puede tapear, así que es mejor pedir mesa arriba para estar más tranquilo.
La carta es muy amplia, y se puede comer tanto de raciones para compartir como a la carta. Está especializado en cocina tradicional y típica de la comarca del Bierzo: Botillo, empanada de batallón, embutidos, morcilla, bacalao a la berciana, oreja a la plancha, parrilladas de carne, tortilla berciana (con pimiento)...
Como he ido muchas veces, he probado un montón de platos, y a cual mejor. Los productos son de primera calidad, y las raciones muy abundantes. En cuanto a los postres, todos caseros; y recomiendo especialmente la famosa tarta de la abuela (capas de galleta con chocolate y crema).
El trato es familiar, y salvo en una ocasión en que el restaurante estaba desbordado de gente, fueron rápidos al servir.
El precio, en torno a los 20-30€ por persona, dependiendo si son raciones o a la carta. En cualquier caso, un sitio muy recomendable con una buena relación calidad-precio. Conviene reservar, especialmente los fines de semana.
This is one of my classics in Ponferrada, I've been to many times. Its location is unbeatable, opposite the castle, and summer riding a terrace in front of it, very nice especially for dining under the castle lit. This restaurant is quite famous in the town, and it's the same owners of the hostel La Encina, located in the back street. The interior of the restaurant is very curious. It has two floors, street floor and basement, and is decorated in a very rustic, with plenty of wood and stone. The upper floor has a large central hole, from where you can see the entire ground floor, with tables arranged around it, in a kind of corridor. Downstairs is the bar where you can enjoy tapas, so it is best to ask up table to be calmer. The menu is extensive, and you can eat both portions to share or a la carte. He specializes in traditional and typical of the region of Bierzo: Botillo, battalion pie, sausages, black pudding, berciana cod, grilled ear, grilled meat, omelette berciana (with pepper) ... As I have gone many times, I've tried a lot of dishes, which already better. The products are top quality, and the portions very generous. As for the desserts, all homemade, and I especially recommend Grandma's famous pie (layers of chocolate cookie and cream). The deal is familiar, and except for one time when the restaurant was overflowing with people, were quick to serve. The price, around € 20-30 per person, depending on whether they are a la carte servings. In any case, a highly recommended site with good value. Booking is advisable, especially at weekends.
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